
Daniel Mairena, presidente de la Fundación Hondureña Renal, reveló hoy que alrededor de 70 pacientes renales han perdido la vida en 2023.
“Es preocupante, existe un alto índice de mortalidad. En lo que va del año alrededor de 70 pacientes han muerto”, declaró a periodistas en Tegucigalpa.
Las causas de muerte han sido múltiples, pero entre ellas se puede enumerar: mala calidad de tratamiento, falta de medicamentos y el inapropiado cuidado del paciente renal.
Al igual que hay un incremento de mortalidad hay un aumento de ingresos en la unidad de hemodiálisis, es decir nuevos pacientes, agregó.