
Cada vez que Rusia ataca territorio ucraniano, las autoridades de Kiev encuentran en los drones y misiles componentes electrónicos fabricados en países occidentales, una situación que Ucrania espera que cambie con la aprobación, acordada esta semana por los Veintisiete, de nuevas medidas de la UE para evitarlo.
Además de dar luz verde a la apertura de negociaciones de adhesión con Ucrania, el Consejo Europeo logró ponerse de acuerdo en la introducción del décimo segundo paquete de sanciones, que llegará casi medio año después del anterior y tendrá como una de sus prioridades reforzar el cumplimiento de las medidas ya adoptadas.
A la espera de que se conozcan los detalles de esta nueva ronda de sanciones, el Consejo adelantó que ampliará la lista de componentes y piezas consideradas de doble uso (susceptibles de ser utilizadas también en la industria militar), cuya exportación a Rusia está prohibida.
Según el asesor del Gobierno ucraniano Antón Gerashchenko, las nuevas medidas también obligarán a las empresas europeas a introducir una cláusula que prohíba a quienes compren sus bienes de uso dual reexportarlos a Rusia.