Esta tarde se registró un nuevo tiroteo en la cárcel de máxima seguridad de la Tolva en Morocelí, El Paraíso.

La información preliminar no establece si hay personas heridas en esta nueva balacera que enciende las alarmas en las autoridades del país.

Por su parte, Julissa Villanueva defendió la intervención en las cárceles, tras las reyertas simultáneas del pasado 8 de abril, y dijo que existen sectores del crimen interesados en hacer ver mal el proceso que ella encabeza a solicitud de la presidenta Xiomara Castro.

Defendió la teoría policial que establece que las balaceras son provocadas por privados de libertad que planifican fugas desde los centros hospitalarios desde donde son trasladados para que reciban atención médica.

Sentenció que los que resulten heridos ahora serán atendidos en los recintos penitenciarios e incluso se habilitarán espacios para ese fin y en el caso que no haya medicinas se proporcionarán de acuerdo a la solicitud de las autoridades.

En otro apartado, señaló que los privados de libertad que son diagnosticados como “locos” se enviarán a pabellones especializados.

El pasado 19 de abril, la interventora Julissa Villanueva ordenó a la Dirección Nacional de Fuerzas Especiales (DNFE) tomar el control de las cárceles hondureñas para evitar nuevas reyertas.

Para la recuperación de la gobernabilidad en el sistema carcelario se anunció la semana pasada un decálogo de medidas que van desde el desarme, bloqueo de telefonía, traslados y clasificación de internos.