
Una reconocida oncóloga de Nueva York habría matado a tiros a su propia bebé y luego se quitó la vida en su lujosa residencia del suburbio de Somers, en el condado de Westchester. Según las autoridades, se trató de un caso de “asesinato-suicidio”.
De acuerdo a los reportes policiales, la doctora Krystal Cascetta, de 40 años, ingresó a la habitación de su única hija y le disparó antes de suicidarse. “La escena [del crimen] es consistente con un asesinato”, aseguró la Policía estatal. Si bien no se proporcionó el sexo y la edad del recién nacido, un registro de bebés en línea, recogido por medios locales, apunta que se trataba de una niña de 4 meses y medio.
Al momento del suceso, el esposo de Cascetta no se encontraba en el domicilio, pero si estaban los padres de la médica. De acuerdo a un oficial citado por NBC News, la llamada de auxilio al 911 la realizó una persona no identificada dentro de la residencia, quien, al escuchar el primer disparo, corrió a la habitación del bebé, pensando que algo se había caído. Tras escuchar la segunda detonación, se apresuró en derribar la puerta, que estaba cerrada con llave, y encontró a la mujer y su bebé sin vida.
Lea también: Siria repele un ataque aéreo “israelí” contra Damasco que deja varios soldados muertos
Cascetta, era una hematóloga oncóloga altamente respetada en el prestigioso hospital Monte Sinaí de Manhattan. Se especializaba en cáncer de mama y lideraba ensayos clínicos e investigaciones para profundizar en el entendimiento de la enfermedad. Colegas y amigos manifestaron en redes sociales su profundo asombro y tristeza por la noticia.
Las autoridades están investigando el caso y no informaron más detalles al respecto. No obstante, un vecino de la doctora reveló a New York Post que vio ambulancias y patrullas policiales en la puerta de la residencia familiar al menos dos veces este verano.