La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, manifestó su apoyo a una madre hondureña cuya hija de dos años, nacida en Estados Unidos, fue deportada junto con ella por autoridades migratorias durante el gobierno de Donald Trump.
El caso ha generado gran indignación, ya que la menor, identificada como VML y nacida en Nueva Orleans en 2023, es ciudadana estadounidense. Sin embargo, fue enviada a Honduras sin que se respetaran los procedimientos legales correspondientes.
Medios internacionales informaron que la detención ocurrió durante un operativo migratorio en Nueva Orleans. El ICE arrestó a la madre y sus dos hijas y las deportó rápidamente, sin considerar la ciudadanía de la niña.
El juez federal Terry Doughty, nombrado bajo la administración Trump, expresó preocupación por el caso y ordenó que la menor no sea separada de su madre. También citó a la directora de la Oficina de Reubicación de Refugiados, Mellissa Harper, para comparecer el próximo 16 de mayo.
El ICE presentó una nota escrita, presuntamente firmada por la madre, en la que expresa su deseo de llevar a su hija consigo, aunque este documento ha sido cuestionado.
El caso ha vuelto a poner en el centro del debate las políticas migratorias del expresidente Trump, especialmente en lo referente a la deportación de ciudadanos estadounidenses, algo que expertos legales señalan como una violación de derechos constitucionales.