
La Conferencia Episcopal de Honduras (CEH) expresó este miércoles su preocupación por la ” crisis política” en el Parlamento ante la elección del nuevo fiscal general del Estado y pidió que se constituya “un diálogo sincero” para buscar una solución.
Los obispos están “preocupados por la crisis política que existe en el país, reflejada en la parálisis legislativa provocada por el enfrentamiento de los partidos políticos incapaces de ponerse de acuerdo en la designación de un fiscal general y un fiscal general adjunto”, indicó la CEH en un comunicado.
La Comisión Permanente del Parlamento de Honduras, conformada por 9 personas, designó el 1 de noviembre de forma unánime a Johel Zelaya como fiscal general y a Mario Morazán como fiscal adjunto, ambos de manera interina.