La reciente excarcelación de 135 presos políticos en Nicaragua marca un paso significativo en el contexto de la crisis política del país. Entre los liberados se encuentran miembros de la organización Mountain Gateway, así como laicos católicos, estudiantes y otros individuos que fueron considerados una amenaza por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Este acto de liberación fue el resultado de extensas negociaciones diplomáticas y un esfuerzo internacional coordinado. Es destacable el papel del gobierno de Guatemala, que aceptó recibir a estos ciudadanos nicaragüenses, facilitando así su reintegración tras un período de detenciones arbitrarias.
La situación en Nicaragua sigue siendo compleja, pero este acontecimiento podría abrir la puerta a un mayor diálogo y a posibles cambios en el panorama político del país.