El teniente general Yaroslav Moskalik, alto funcionario del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia, falleció este viernes tras la explosión de un coche bomba en la localidad de Balhija, ubicada en la región de Moscú, según informó el Comité de Instrucción de Rusia (CIR).
Moskalik, quien fue subjefe del mando de operaciones del Estado Mayor hasta 2021, perdió la vida al pasar junto a un vehículo Volkswagen Golf en el que se activó de forma remota un explosivo.
El atentado ocurrió en una zona residencial al este de Moscú, construida específicamente para militares retirados. Al lugar se desplazaron equipos de investigadores, peritos y otros agentes para inspeccionar el sitio del ataque.
Medios rusos difundieron imágenes de la explosión, que se produjo justo cuando el general, de 59 años, caminaba cerca del automóvil. Moskalik estaba incluido en la base de datos ucraniana “Mirotvorets”, donde figuran personas consideradas “enemigos de Ucrania”. Además, había participado en 2015 en las conversaciones de paz sobre el conflicto del Donbás dentro del llamado formato de Normandía.
La portavoz del CIR, Svetlana Petrenko, indicó que el artefacto explosivo era de fabricación casera y contenía metralla para maximizar su impacto. El comité ha iniciado una investigación por homicidio y continúa examinando la escena del atentado, sin que hasta ahora se haya atribuido oficialmente la autoría.
Una fuente policial citada por la agencia TASS confirmó que en el lugar se hallaron fragmentos del artefacto explosivo. Por su parte, el canal BAZA informó que una bombona de gas, con un poder explosivo similar a 300 gramos de trilita, pudo haber sido utilizada para aumentar la potencia de la detonación.