La juez del Juzgado de Letras Penal de la Sección Judicial de Tegucigalpa, Gabriela Gallo, ordenó nuevamente al médico forense del Ministerio Público, Darwin Alexander Pineda Montalván, el encargado de realizar la autopsia médico legal al cadáver de Ana Lizeth Hernández Cantillano.
De igual forma, para la realización de esta autopsia el doctor Pineda será asistido por los técnicos Deybi Alexander Sánchez (técnico disector), Hansy Ávila (fotógrafo forense); Miguel Ángel Medina Sánchez (técnico receptor), Robin Velásquez Martínez (técnico de atención al doliente).
De acuerdo a las dos órdenes giradas desde el despacho seis de la jueza, y a las que LA TRIBUNA tuvo acceso, se informó en la primera orden enviada al médico forense que “por instrucciones del despacho de justicia, sírvase practicar de manera urgente la autopsia al cadáver de Ana Lizeth Hernández Cantillano, preferentemente en la Morgue de la Dirección de Medicina Forense de la ciudad de Tegucigalpa ubicada atrás del Hospital Escuela, ya que es allí donde por razones evidentes se cuenta con las comodidades, herramientas, instrumentos, energía, iluminación, agua, etc., necesarias para resguardar las evidencias provenientes del cadáver, así como la bioseguridad requerida, sin perjuicio, de que, en el caso de no se le permita el ingreso a estas instalaciones podrá hacer uso de otras que reúnan tales condiciones.
Asimismo, se le informa en la orden que las primeras 24 horas no han precluido, sin embargo se le amplía el término de veinticuatro horas más, igualmente se hace de su conocimiento que será asistido por los técnicos antes mencionados, sin perjuicio de que dicha asistencia pueda ser brindada por otro personal técnico, en caso de ser necesario.
Se les advirtió que, de no acatar las órdenes de este juzgado, incurrirán en el delito de desobediencia.
A LA POLICÍA
Simultáneamente, la jueza Penal giró una segunda orden dirigida al director de la Policía Nacional, comisionado general Héctor Gustavo Sánchez, para dar resguardo al doctor Darwin Alexander Pineda Montalván y al equipo que lo asistirá en el lugar en que se realizará la autopsia del cadáver de Hernández Cantillano siendo preferiblemente Medicina Forense o en su defecto cualquier otro que dicho doctor designe.
La togada ordenó que el resguardo durará hasta que se cumpla con la realización de la referida autopsia.
La kilométrica espera por parte de la familia de la ahora occisa comenzó desde el jueves cuando se giró la primera orden judicial para que se realizara ayer viernes a primera hora, sin embargo, hubo contratiempos que obligaron nuevamente a girar una segunda orden judicial en horas de la tarde de ayer.
La familia de Hernández Cantillano se encuentra desde la noche del jueves haciendo vigilia a la espera de poder retirar el cuerpo sin vida de la joven y darle cristiana sepultura a Ana Lizeth, encontrada muerta el domingo 19 de marzo al interior de su vivienda en la residencial Villa Foresta al sur de la capital.
Preliminarmente, el reporte de levantamiento detalla que la joven presentaba un disparo en la cabeza, pero será con la realización de la autopsia que se determinará si es uno o dos disparos, la entrada y salida del mismo, en caso de haberla, además de la hora aproximada en la que ocurrió la muerte, también la causa y manera de muerte desde el punto de vista médico legal, así como otros hallazgos que pueda encontrar el forense durante el examen interno al cadáver de Ana Hernández.
