El ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, ha dado órdenes al Ejército este viernes para que «amplíen las zonas de seguridad» en la Franja de Gaza, incluyendo el desplazamiento de tropas a nuevas áreas del enclave que serían «anexionadas» hasta que el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) libere a los secuestrados el 7 de octubre de 2023, en el marco de la nueva ofensiva lanzada por Israel desde el martes, cuando rompió el alto el fuego acordado en enero con el grupo islamista.
Katz declaró en un comunicado: «Si Hamás continúa negándose a liberar a los rehenes, he ordenado a las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) que ocupen más áreas de Gaza, evacuando a la población, para extender las zonas de seguridad con el fin de proteger a las comunidades israelíes y a nuestros soldados, controlando de manera permanente el territorio».
Asimismo, advirtió: «Cuanto más se resista Hamás a liberar a los secuestrados, más territorio perderá, el cual será anexionado a Israel», añadiendo que «Israel seguirá con la operación iniciada el martes, que incluye bombardeos y maniobras terrestres, intensificándola hasta que Hamás libere a los rehenes».
Katz explicó que Israel se mantiene en línea con la propuesta del enviado especial de Estados Unidos para Oriente Próximo, Steve Witkoff, para liberar a los rehenes, vivos o muertos, en dos fases y con un alto el fuego en medio, sin comprometer la seguridad de Israel.
Además, destacó que Israel «aumentará la intensidad de los combates con ataques aéreos, marítimos y terrestres, ampliando las operaciones terrestres, hasta la liberación de los rehenes y la derrota de Hamás, utilizando todos los recursos militares y civiles, incluida la evacuación de la población gazatí al sur y la implementación del plan del presidente estadounidense Donald Trump para la transferencia voluntaria de los residentes de Gaza».