El uso voluntario de las mascarillas en lugares abiertos del territorio nacional entró en vigencia este miércoles tras la publicación del decreto 12-2023 en el diario oficial La Gaceta.

La medida entra en vigor, tres semanas después de haber sido aprobado en el Congreso Nacional, que dispuso eliminar su uso obligatorio como medida para evitar el contagio del virus SARS-CoV-2 y tomando en consideración que Honduras ya ha aplicado más de 13.5 millones de dosis de vacunas anticovid.

Las mascarillas seguirán siendo obligatoria en establecimientos prestadores de servicios de salud como hospitales públicos y privados, centros de salud, farmacias, laboratorios, clínicas odontológicas, clínicas médicas, y lugares relacionados con la salud.

Así mismo su uso será obligatorio en espacios donde no pueda mantenerse distanciamiento físico de por lo menos uno punto cinco metros, cuando se trate de espacios cerrados, abarrotados y con poca ventilación.

También será obligatorio dentro de centros educativos públicos y privados de todos los niveles, en los cuales los espacios sean reducidos, cerrados y con poca ventilación, según lo establezca la Secretaría de Estado en el Despacho de Salud (SESAL), de acuerdo al comportamiento epidemiológico.

Hace varias semanas cientos de hondureños dejaron atrás el uso de los cubrebocas. La publicación del decreto oficializa lo que los hondureños han venido aplicando, incluso antes de que se aprobada su suspensión en el Legislativo.

Luego de la derogación del decreto 58-2020, la responsabilidad pasara a la Secretaría de Salud, y en caso de ser necesario decidirá si su uso podría volver a ser obligatorio en algún caso, o focalizado, pero ya no sería a nivel nacional.