
Porque durante la gestión como Embajadora de su país ante el pueblo y gobierno hondureño, la Señora Luz Marina Rivera Rojas se dedicó a trabajar en el fortalecimiento de las relaciones que existen entre las repúblicas de Colombia y Honduras, la Presidenta Xiomara Castro le confirió la Condecoración de la Orden José Cecilio del Valle en el Grado de “Gran Cruz Placa de Plata”.
El Canciller Eduardo Enrique Reina fue el encargado de entregar el galardón a la Excelentísima Señora Rivera Rojas, a quien despidió diciéndole que supo representar muy bien “a la querida y hermana nación de Colombia y contribuyó a ser más fuertes los lazos que atan a nuestros dos países”. El diplomático recordó que la buena relación quedó demostrada porque Colombia fue el primer país visitado por la Presidenta Xiomara Castro como jefe de Estado, al llegar a Bogotá para la Toma de Posesión del Presidente Gustavo Petro, el pasado 7 de agosto.
“Entre Honduras y Colombia mantenemos una relación histórica; Colombia constituye un aliado y un amigo de primer orden y, en base a una amistad sólida y perdurable, se ha dado pie al establecimiento de diversos programas de cooperación entre los dos países, entre ellos, los de lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado, campo en el que nos hemos beneficiado de la amplia experiencia colombiana”, aseguró el Canciller Reina.
Emocionada y agradecida, la Embajadora Rivera Rojas expresó que el galardón otorgado es un reconocimiento a la histórica y estratégica relación bilateral entre Colombia y Honduras, y que le enorgullece que lleve el nombre del Sabio Valle, “un hombre insigne, humanista, curioso intelectualmente… a quien sus ideas lo condujeron a tomar participación política clave en el proceso nacional y regional, dejando un legado de coherencia intelectual y esfuerzo por el saber”.
“Manifiesto mi agradecimiento en el nombre del Estado y del Gobierno de Colombia y en el mío propio, por este gesto que, reitero, es una muestra más de las históricas relaciones diplomáticas que unen a dos naciones hermanas y socias en materia de las más altas trascendencias que los dos países hemos sabido tejer en el día a día… pude ser el agente de continuidad para este tejido de gestos y hechos que proyectan a ambos países, les dan la posibilidad de mantener y alimentar continuamente estos vínculos basados en la identidad latinoamericana y caribeña, la cual está marcada por la condición de ser países vecinos”.
La homenajeada dijo que dentro de 18 meses se cumplirán 200 años de relaciones diplomáticas permanentes entre ambas naciones, periodos donde se han otorgado muchos beneficios mutuos. Por ejemplo, calificó como “trascendental” el haber albergado la reunión realizada en Cartagena el 12 de mayo de 2011, durante la cual se suscribió el acuerdo de Cartagena para abordar la crisis generada por el golpe de Estado contra el expresidente Manuel Zelaya, “lo que permitió su regreso a Honduras para participar en política y para la generación de instancias que aportan, especialmente, a la promoción y defensa de los Derechos Humanos”.
Para el canciller hondureño, el eje Tegucigalpa-Bogotá históricamente ha funcionado “muy bien y de manera muy fluida, la confluencia entre ambos gobiernos se da en virtud de una lucha común por impulsar el desarrollo sostenible, la preservación del medio ambiente y, sobre todo, por disminuir la desigualdad, la inequidad y la violencia, que tanto afecta a nuestros pueblos”.