La Marina de Tailandia informó este sábado de que los servicios de búsqueda han rescatado a otros siete cadáveres en el perímetro de búsqueda de los desaparecidos tras el naufragio de un navío de guerra hace casi una semana.

Los cuerpos fueron localizados y recuperados entre la noche del viernes y la tarde de este sábado y ahora serán sometidos a pruebas forenses para determinar sus identidades, un proceso que podría llevar entre tres y cuatro días, según precisó la armada en sus redes sociales.

Si se confirma que las víctimas eran tripulantes del buque militar HTMS Sukhothai, que se hundió el pasado domingo con 105 individuos a bordo, el número de desaparecidos -cifrados por el momento en 23 a la espera de la confirmación- será oficialmente reducido a 16, agregó.

Un total de seis muertes ya han sido confirmadas a causa del siniestro, que provocó también la hospitalización de 18 personas, mientras que 58 tripulantes fueron rescatados con vida y sin heridas.

El HTMS Sukhothai, un buque corbeta, se hundió en la noche del pasado 18 de diciembre a unos 37 kilómetros de la costa de la provincia tailandesa de Prachuap Khiri Khan, al suroeste de Bangkok, debido a un fuerte temporal que provocó la entrada de agua en la sala de máquinas.

Las investigaciones preliminares indican que el barco no contaba con chalecos salvavidas suficientes para todos los tripulantes, mientras han surgido dudas sobre las condiciones de navegabilidad del buque, ya que este supuestamente tenía pendiente una revisión sobre el mantenimiento del casco.

Esos factores hicieron que voces de la oposición anunciaran que presentarán una moción urgente para un debate sobre el incidente en el Parlamento y pidieran la renuncia del primer ministro tailandés, Prayut Chan-ocha, como ministro de Defensa, cargo que ejerce simultáneamente, para “demostrar su responsabilidad”.