Como parte de la operación “Fe y Esperanza”, y tras la orden de la Presidenta Xiomara Castro, de ejecutar masivos operativos y tomar el control de los centros penitenciarios, la Granja Penal de Danlí, en horas de la mañana de ayer, quedó bajo la dirección de las Fuerzas Armadas de Honduras (FF. AA.).

Los medios de comunicación no fueron atendidos, se desconoce quién o quiénes serán los directores o administradores de la cárcel, que había implementado proyectos de rehabilitación, de emprendimiento, cultivo de vegetales, de tilapia, así como la impartición de talleres de mecánica, corte y confección.

Las autoridades actuales entregaron toda la información necesaria, así como las instalaciones y a partir de ahora, la Policía Penitenciaria cumplirá las órdenes de las FF. AA. y se mantendrán bajo la estrategia de la operación designada para centros penales.

Hasta ayer se desconocía si hay nuevas directrices en cuanto a las visitas, sin embargo, las requisas ordenadas a nivel nacional en centros penales, iniciaron en Danlí desde la noche del lunes; se estima un contingente de alrededor de 250 militares.

EXISTE HACINAMIENTO

La Granja Penal de Danlí es una de las prisiones con menos problemas o enfrentamientos entre reos y policías penitenciarios, sin embargo, el control de la misma fue entregado ayer a las FF. AA., para cumplir con el mandato presidencial.

El Centro Penal de Danlí, conocido también como Granja Penal de Danlí, inició funciones en 1982, con una capacidad de 250 privados de libertad.

Actualmente hay 679 reclusos, de los cuales 22 son mujeres y según la oficina regional del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) en las celdas hay sobrepoblación o hacinamiento no controlado.