El piloto británico George Russell (Mercedes) sufrió un tremendo accidente en la última vuelta del Gran Premio de Australia que dejó su coche destrozado.
En la vuelta 58, la última del Circuito de Albert Park de Melbourne, Australia, Russell perdió el control al entrar en una de las curvas y después de deslizarse sobre la grava se estrelló contra la barrera de contención de forma aparatosa, pues su monoplaza se quedó sin la llanta izquierda delantera.
Lo desesperante del accidente sucedió segundos después cuando Russell, después de dar unos giros, se quedó en medio de la pista lo que provocó que su equipo inmediatamente pidiera que levantaran la bandera roja para detener la carrera y evitar que otro auto se estrellara con el piloto británico.