Se informó la desarticulación de una banda de secuestradores que era liderada por policías activos en el norte de Honduras.

Portavoces de la Policía Nacional dieron a conocer la desarticulación de una banda de secuestradores integrada, por cuatro funcionarios policiales activos y cuatro civiles, los que se dedicaban a delinquir a nivel nacional.

Con esta captura, la institución policial dejó claro que no permitirá que ninguno de sus miembros cometa, participe u omita acciones ilícitas que están fuera de la Ley.

En ese sentido, equipos de la Unidad Nacional Antisecuestros (UNAS) de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) con apoyo de la Dirección Nacional de Fuerzas Especiales (DNFE) ejecutaron la detención de los sospechosos de manera simultánea en los departamentos de El Paraíso, Francisco Morazán, Cortés, Choluteca y Yoro.

Los ahora capturados fueron individualizados como: un policía activo de 28 años, residente en Concepción de María, Choluteca, conocido con el alias de «Chacorta»; otro agente activo de 35 años, residente en Yucarán, El Paraíso, conocido con el alias de «El Chele»; un tercer miembro policial de 22 años, residente en San Matías, El Paraíso; y el cuarto un efectivo de 29 años, residente en El Corpus, Choluteca, conocido con el alias de «El Cantante».

Asimismo, se detuvo a un técnico electricista de 31 años, residente en Choluteca, Choluteca, conocido con el alias de «Quiroz»; un comerciante de 55 años, residente en la colonia Cerro Grande, Tegucigalpa, Francisco Morazán, conocido con el alias de «Don Carlos», considerado el negociador de la organización delictiva; un agricultor de 47 años, residente en El Paraíso, El Paraíso; y un ingeniero industrial de 40 años, conocido con el alias de «La Bomba».

A todos ellos, se les ejecutó una orden de captura emitida, por el Juzgado de Letras con Competencia Territorial Nacional en Materia Penal de San Pedro Sula, Cortés, en fecha 23 de mayo de 2023.

El documento judicial establece que se les siguen diligencias, por suponerlos responsables de haber cometido el delito de secuestro agravado en perjuicio de testigo protegido, por el cual solicitaron la cantidad de 5 millones de lempiras a cambio de su libertad.

Durante las distintas operaciones, se decomisó: 10 teléfonos celulares de diferente marca y modelo, un vehículo tipo camioneta, marca Ford, modelo Escape, color negro; un vehículo tipo camioneta, marca Nissan, modelo Murano, color blanco; y prendas de vestir utilizadas el día del secuestro.

Todos los detenidos fueron puestos a las órdenes de la Fiscalía hondureño.