
Las autoridades de Costa Rica decomisaron 2.148 kilos de cocaína que estaban ocultos en un contenedor de exportación de fruta que tenía como destino el puerto de Amberes, Bélgica, caso por el que fue detenido un sospechoso costarricense.
«Esto es un mensaje directo a esas organizaciones. Operando en Costa Rica enfrentarán la justicia hasta las últimas consecuencias. Vamos por ellos», declaró este domingo el ministro de Seguridad, Mario Zamora, en una conferencia de prensa.
El decomiso lo llevó a cabo la Policía de Control de Drogas (PCD) el sábado en la Terminal de Contenedores de Moín, provincia de Limón (Caribe), que es el principal puerto de Costa Rica y operado por la firma internacional APM Terminals.