El Gobierno de Costa Rica contabiliza hasta este viernes el paso de más de 300.000 migrantes en lo que va del 2023 que integran un flujo que cruza el continente con destino a Estados Unidos, y declaró emergencia nacional con el fin de agilizar la movilización de recursos para atender la situación.
El presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, firmó este viernes el decreto ejecutivo que declara Emergencia Nacional la crisis migratoria, lo que permite a la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) tomar una serie de medidas administrativas, operativas y económicas para atender la situación.
Los datos oficiales de Costa Rica indican que en lo que va del 2023 han ingresado por la frontera con Panamá 320.110 migrantes, de los cuales 214.146 (68 %) son venezolanos, seguidos por 37.156 ecuatorianos; 21.255 haitianos; 16.294 chinos; 8.851 colombianos; 2.593 chilenos; 2.536 indios; 2.413 afganos; 2.144 peruanos y 12.722 de otras nacionalidades.