Unos 14.000 indígenas de todos los puntos del país marcharon por las calles de Bogotá este miércoles, a los que se sumaron sindicalistas, trabajadores y estudiantes, para apoyar las reformas planteadas por el Gobierno Nacional y para pedir más acción ante la escalada de violencia contra sus pueblos.
La llamada minga indígena fue llegando desde el lunes para participar en la manifestación y buscando establecer una mesa de diálogo con el Gobierno en los próximos días. Los indígenas abarrotaron la Plaza de Bolívar como se esperaba.
La pacífica marcha destacó por la presencia masiva de niños y por las diferentes banderas que portaba cada grupo indígena para diferenciarse del resto, aunque el bastón de mando y las vuvuzelas que llevaban cada uno de los manifestantes los unía como si se tratasen de una misma comunidad.