
La idea del alcalde Jorge Aldana es aplicar medidas prácticas que eviten los grandes congestionamientos en la hora pico, entre ellas drones para monitorear el tráfico y avisarle a los conductores en tiempo real y semáforos móviles en atascos donde no hay policías controlando el tráfico.
También lanzará una campaña entre los conductores para que gestionen mejor su tiempo al momento de salir al trabajo o a alguna diligencia. Al mismo tiempo, contempla duras multas económicas a los choferes de taxis y buses que recojan o bajen pasajeros en cualquier parte de la vía pública. “No es posible que teniendo una bahía para hacerlo, se paran en cualquier lado provocando un tráfico infernal”, agregó.
El alcalde dijo durante la reunión que recibió una red vial deteriorada que también incide en los embotellamientos. A eso se suma, que está diseñada para unos 200 mil vehículos circulando a diario, frente a los 600 mil en la actualidad sin incluir 150 mil que entran del interior todos los días. “Es un colapso total y por eso tenemos que aplicar medidas drásticas y esperamos el apoyo de la población”, agregó.