La organización SNAP (Red de Sobrevivientes de Abuso por Sacerdotes), que trabaja documentando casos de abuso sexual cometidos por clérigos y brindando apoyo a las víctimas, ha acusado este miércoles a los cardenales Péter Erdö (Hungría) y Mario Grech (Malta) de encubrir estos delitos.
Durante una rueda de prensa celebrada en Roma, a pocas horas del inicio del Cónclave, SNAP denunció que ambos cardenales, en sus funciones dentro de la Iglesia, no habrían actuado con la debida diligencia frente a denuncias de abusos contra menores.
La organización presentó supuestas pruebas, incluidas cartas firmadas por el cardenal Grech, que indicarían que tenía conocimiento de ciertos casos.
Se le acusa de haber orientado personalmente a una víctima sobre el proceso canónico, lo que habría permitido que el agresor siguiera activo incluso tras una apelación. También señalan que Grech ignoró directrices emitidas por el Vaticano.
En el caso del cardenal Erdö, SNAP lo responsabiliza de haber manejado de forma negligente una denuncia de abuso en 2003.
Según la organización, no solo se negó a reunirse con la víctima, sino que esta fue arrestada tras insistir en ser escuchada.
Además, afirman que se le forzó a asistir a consultas con psicólogos afiliados a la diócesis, lo que SNAP califica como una forma recurrente de intimidación hacia sobrevivientes.