Según un nuevo estudio, fumar tiene efectos a largo plazo sobre el sistema inmunitario. Científicos del Instituto Pasteur francés han descubierto que años después de dejar el tabaco sus efectos en las defensas inmunitarias del organismo persisten. El estudio se publicó el miércoles en la revista científica Nature.
Los investigadores se propusieron estudiar qué otros factores, además de la edad, el sexo y la genética, intervienen en la forma en que el organismo se defiende de los invasores externos.
Expusieron muestras de sangre de 1.000 individuos sanos a virus y bacterias y observaron sus respuestas inmunitarias, teniendo en cuenta 136 variables, como el índice de masa corporal (IMC), el tabaquismo, el sueño y el ejercicio, entre otras.