
En una trágica escalada de violencia en Ecuador, cuatro niños, incluido un bebé de cinco meses, perdieron la vida en un brutal ataque a tiros perpetrado por sicarios en su hogar en Guayaquil. Las autoridades informaron el martes que la Fiscalía inició una investigación sobre el asesinato de los menores, cuyas edades oscilaban entre los cinco meses y los siete años.
El violento suceso tuvo lugar en el sector empobrecido de Guasmo Sur, una zona infestada por las bandas criminales Los Lagartos y Mafia 18, que luchan por el control territorial para el tráfico de drogas. Según el comandante de la policía de Guayaquil, coronel Víctor Herrera, los sicarios se equivocaron de objetivo, apuntando inicialmente a otra vivienda, pero acabaron perpetrando el ataque en la casa de la familia cristiana.
La madre de los niños resultó gravemente herida y está hospitalizada con pronóstico reservado. El general Herrera explicó en una conferencia de prensa que el evento violento no estaba dirigido a esa familia en particular, sino a una casa adyacente donde se encontraron materiales para fabricar explosivos.