
Los pacientes oncológicos del Hospital General San Felipe, viven una precaria situación cada vez que asisten a consulta, siendo su estado de salud delicado, los afectados se quejan diariamente por el daño de las máquinas, ya que estas son viejas, y se les dice que vayan a buscar los servicios en un hospital privado.
Según Sandra Aquino, presidente de la Asociación de Pacientes Oncológicos, hay un promedio de más de 600 pacientes en espera para ser atendidos con sus tratamientos de quimio y radioterapia, en el mes de junio había más de 490, tres meses después la cifra se puede duplicar.
También hay enfermos con nuevos diagnósticos, es decir, que necesitan esas radioterapias y deben ser tratados a la brevedad posible y no se está haciendo.